Por Baybars Altuntas, Presidente Ejecutivo del Foro Mundial de Inversionistas Ángeles (WBAF) – ‘‘En el pasado, los inventos fueron importantes para el desarrollo económico de las sociedades. En el siglo XXI, sin embargo, no es la invención sino la innovación lo que cuenta. En aquellos primeros tiempos, no se necesitaban habilidades empresariales para llevar un invento al mercado porque los clientes estaban listos para comprar cualquier cosa nueva.
Los empresarios necesitan mucho más que una idea inteligente para tener éxito: necesitan un conjunto complejo de habilidades y financiamiento para desarrollar, ejecutar y llevar su idea al mercado. La mejor forma de financiamiento inicial es cuando se combina dinero, conocimientos, tutoría y trabajo en red. Esta es un financiamiento inteligente y ofrece a los empresarios y las pymes una perspectiva mucho mejor de éxito. Para que las sociedades de todo el mundo prosperen económicamente, necesitamos más empresarios y pymes exitosos.
Consideremos las diversas fuentes de financiamiento disponibles para los emprendedores: más allá del arranque básico, existen empresas corporativas, inversionistas ángeles, plataformas de financiamiento colectivo, aceleradores, VC, bancos, subvenciones públicas, fondos de coinversión, concursos de planes de negocios, oficinas de transferencia de tecnología, oficinas familiares, inversionistas de capital privado y bolsas de valores. Con la notable excepción de los inversionistas ángeles, todas estas fuentes solo brindan financiamiento, nada más.
Los inversionistas ángeles, son lo que considero, fuentes de financiamiento inteligente por su capacidad de influir en el desarrollo económico de un país proporcionando algo más que dinero a los empresarios y las pymes. Contribuyen con su propio conocimiento, brindan tutoría y comparten sus propias redes para contribuir a los negocios en los que invierten. Por lo tanto, se convierten en principales impulsores de la innovación y los líderes naturales de los mercados de inversión en etapa inicial del mundo.
En los últimos años, más de 300 mil inversionistas ángeles invirtieron más de $25 mil millones de dólares en empresas emergentes en los EE. UU. y más de 310 mil inversionistas ángeles invirtieron más de 6 mil millones de euros en Europa. El tamaño total estimado del mercado global de inversión ángel es de más de $50 mil millones dólares cada año.
Los gobiernos de todo el mundo han entendido la importancia de la ‘inversión ángel’ para impulsar sus economías. Muchos gobiernos, particularmente en Europa, ofrecen generosos incentivos fiscales para los inversionistas ángeles. El Reino Unido y Turquía, por ejemplo, ya aprobaron leyes de inversión ángel para respaldar dicho sistema. Varios países de Medio Oriente, particularmente en el CCG, han descubierto el sistema de inversión ángel.
Las encuestas revelan que los emprendedores pueden crear más historias de éxito si reciben inversiones de inversionistas ángeles calificados. Por lo tanto, educar a estos inversionistas se ha vuelto en una tendencia mundial cuyo objetivo es mejorar su contribución a las nuevas empresas en las que invierten.
A raíz de la pandemia por COVID-19, la transformación digital se volvió una prioridad para las economías mexicanas y latinoamericanas. Se reconoce que, para alcanzar este objetivo, es necesario empoderar a sus ciudadanos para que lideren iniciativas estratégicas. Esto se puede lograr proporcionando programas educativos diseñados específicamente para satisfacer las necesidades de los inversionistas ángeles locales, empresarios y fundadores de empresas emergentes. Dichos programas les ayudarán a adquirir los conocimientos y habilidades necesarios que, a su vez, promoverán la creatividad, la innovación y el espíritu empresarial, permitiéndoles crear recursos de financiación alternativos, como la inversión ángel, para facilitar el acceso a capital. Todos estos esfuerzos abrirán el camino para que las nuevas empresas y emprendedores de México puedan competir a nivel mundial.”